Por regla general cuando publico un texto en este sitio, procuro escribir una entradilla que  refleje aquello que  dicho texto me ha inspirado al escribirlo y aquello que me ha llevado a hacerlo.

En este caso,  estando sumido en el profundo trance en el que la escritura me  sumerge, tomé un descanso y el azar, otra vez el destino, me llevó  sin remisión a esta hermosa canción titulada Te sigo soñando elevada a los cielos al alimón por DePedro y por esa inigualable diva llamada Luz Casal.

Esta canción hermosa y delicada, que he de reconocer que no conocía, dice cosas tan bellas como las que siguen:

Me sigues gustando,
te sigo soñando,
es esta la forma que tengo
cariño de demostrarlo.

De modo que entre  mi viaje equinoccial y las sensaciones que la canción me trasnmitieron, me lancé en tromba sobre mi cuaderno de trabajo. Tras robar un primer verso traté, espero haberlo conseguidio, de encontrar las palabras que dijeran lo que mi corazón decía, lo que mi alma soñaba y lo que mi piel deseaba.

Si te apetece dar tu opinión no dudes en hacerlo en los comentarios que encontrarás al final del texto. Me encantará conocer tus opiniones sobre este poema y el tema tratado en él.


Me sigues gustando

Me sigues gustando

a pesar de mi y a causa de ti.

Te continúo queriendo,

lo digo, lo canto, lo escribo

y tú sonríes al escucharlo.

 

El tiempo transcurre

feroz e implacable

y te sigo anhelando

como a la lluvia de agosto,

como a la caricia de una abuela

como al sopor somnoliento

de un recién nacido.

 

La alegría que me invade al verte

me conduce a la ilusión

loca y apasionada de mi infancia,

a una noche de reyes.

A la hoguera de San Juan

con sus fuegos sublimes

que purifican el entendimiento

y también la razón

y equilibran el orden universal.

 

Lloro y río emocionado

frente al calor de las llamas

ante el ardor de las brasas

con mis manos y las tuyas

anudadas con una fuerza sin igual.

© “Me sigues gustando.” es un poema de Oriol Villar-Pool